Hola, familias.
Volvemos con la entrada semanal para repasaros algunas de
las actividades elaboradas a lo largo de la semana. En el aula de 1 año
observamos como cada día progresan en su control corporal, en su intención
comunicativa y Macu disfruta mucho de sus pequeñas travesuras. A través de
canciones, narraciones y estimulando con diferentes ejercicios su progreso
psicomotor la semana pasa volando con ellos/as (y cuando comentamos en
retrospectiva cómo eran al inicio de curso hasta ahora nos sorprendemos con una
sonrisa viendo todo lo que han madurado y crecido casi sin darnos cuenta). Son
una caja de sorpresas y en un suspiro parecen ya otros. De aquí a final de
curso seguro que nos siguen sorprendiendo. Os dejamos con las imágenes y el
préstamo semanales en el que hemos priorizado según la edad una mayor narrativa
o el juego a través de la importancia de la materialidad en la construcción del
discurso narrativo con algunos libros juego o imagiarios.
Alumno/a |
Álbum |
Darío |
Comer un lobo |
Unai |
Próxima dinámica |
Inés |
Si yo fuera... Mónica Gutiérrez Serna. |
Valentina |
Próxima dinámica |
Triana |
Si yo fuera un león. Isabel Pin |
Nora |
Mi colección de caras. Antonio Ladrillo |
Daniel |
Colección de minilibros. J y A Ahlberg |
En el aula de 2 años las actividades están más centradas al inicio del periodo con la autonomía y la socialización conjunta. Dejamos un mayor espacio de tiempo para que dispongan el aula, promover tareas como ayudar a repartir el desayuno o las botellas del agua, gestionar su higiene personal en el almuerzo, recoger los materiales, poner las pinturas, repartir los baberos, etc. Los materiales están a su altura y su disposición para que organicen. Además, al conocer muchas de las reglas de convivencia me sorprendo muchas veces cuando algún alumno/a indica a otro/a cómo se debe jugar o si el comportamiento no lo consideran adecuado. En esos casos es cuando medio para recordarles las normas al respecto, pero intento que mi papel sea más de observador que no dirigiendo su actividad. Esto lleva su tiempo y nos habla de la concepción del tiempo del adulto y las diferencias con la primera infancia. En estas edades no son capaces de elaborar esquemas temporales sobre el tiempo (por ese motivo las rutinas son parte esencial, aunque cada vez las reducimos en su duración para centrarnos en aquellos contenidos específicos del trimestre: el invierno y el conteo con sus refranes, canciones y poemas que volveré a grabaros próximamente como en el primer trimestre).
Con esta reflexión nos
adentramos a cómo los adultos imponemos nuestro tiempo (por muchos motivos: la
conciliación laboral y familiar, compromisos) y cómo vivimos continuamente
asediados por el reloj para llegar a todas partes. A mí también me pasa como
adulto, por ese motivo en la escuela prefiero que el contenido educativo sea
fomentar su autonomía como principio esencial del respeto y cariño que les
tengo como alumnado y que el tiempo no sea un continuo vaivén que solo
comprendemos nosotros (con nuestro reloj de precisión suiza en la que sabemos
cómo está estructurada la jornada, la hora de salida, la hora de comer, el
tiempo de descanso…está todo calculado al milímetro) y que aún no comprenden
ellos/as. Les puede frustrar no saber el por qué de las prisas y no es bueno
atosigarles (y este equilibrio es difícil dado que como adultos también somos
mediadores de referencia y tenemos que poner fin a una rabieta injustificada,
por ejemplo).
También se nota su progreso en el habla y su capacidad
comunicativa, por este motivo hay una mayor libertad en el juego y un mayor
énfasis en cuidar los espacios para que tengan una lectura autónoma y relajada.
Vemos cómo cada vez son capaces de pasar la página en el orden correcto, narrar
por sí mismos las historias (e incluso inventándoselas al ritmo de una canción)
o compartirlas con otro compañero/a. También discuten y demandan nuestra
atención cuando quieren un álbum que tiene otro compañero/a y dicen que es
suyo. Esto es parte de las características de su pensamiento egocéntrico propio
de la etapa (el sentido de la posesión sobre todo aquello que les gusta y que
solo pueden ver el mundo desde su perspectiva, dado que la empatía es un
proceso complejo que se desarrolla posteriormente: ponerse en el lugar del
otro).
Mediamos para que dialoguen, pero normalmente esto conlleva
una rabieta y como es injustificada preferimos mediar en su conflicto que no
contentarlos para que no tengan un berrinche puesto que esto generaría un
comportamiento recurrente y que repetirían cada vez que quisieran algo. Al no
tener a veces la capacidad de expresión o de regulación de sus movimientos,
suelen emplear estrategias que pueden ser rudas como intentar quitarles de las
manos aquello que quieren a otros/as. Esto tampoco fomenta la convivencia y
entenderéis que nuestra mediación es impedirlo, marcar los límites y dialogar
con ellos/as cada vez que sucede o poner esas situaciones como ejemplo. Son
situaciones naturales y como tales dedicamos tiempo a que se solucionen porque
es un elemento clave en su educación no solo como escolares, también como
personas.
Esta semana os dejamos con las imágenes de sus actividades.
Estas han requerido diferentes habilidades motrices: desde pintar con ceras
blandas, la extensión de color con el pincel, pegar algodón o papel de aluminio
con sus diferentes texturas. Las tarjetas ejemplifican el juego de cu-cú
inspirado en álbumes como los de ImaPla de Los colores hablan (Océano Travesía)
que tanto les gustó en su periodo de adaptación. Ampliaremos la semana que
viene con nuevos animales y colores. Adicionalmente, otra de las actividades
recurrentes es el conteo del 1 al 10. En esta fase queremos que comiencen a
identificar los números y tenemos dos canciones para el conteo progresivo (1 al
10) y otra en lengua catalana para el conteo regresivo (10 pometes té el pomer).
Próximamente haremos la grabación de estas dinámicas para que sigáis observando
todo lo que aprenden.
Finalmente, otro de los nuevos poemas que han aprendido:
Media Luna de Federico García Lorca que sigue mostrándonos curso tras curso que
su poesía dedicada a la infancia conecta a unos niveles inexplicables.
La luna va por el
agua.
¡Cómo está el
cielo tranquilo!
va segando
lentamente
el temblor viejo
del río
mientras que una
rama joven
la toma por
espejito.
Aquí tenéis el préstamo semanal. A partir de ahora no
llevaré el control de los álbumes que se llevan o han llevado. Como observaréis
en las imágenes la cantidad de álbumes a su disposición es considerable y si
quieren repetir un título es porque realmente sienten un apego a esa lectura. Y
os proponemos una nueva dinámica esta semana:
El día que devuelvan el álbum al centro que traigan en la
bolsa también uno de sus álbumes favoritos de vuestra biblioteca doméstica para
que durante la semana se lo leamos en el aula y lo presenten al resto de sus
compañeros/as. El viernes se devolverán los álbumes junto con el préstamo de la
semana siguiente y sus actividades. En caso de que el álbum lo necesitéis de
vuelta antes (porque lo piden para ir a dormir o lo piden en casa
insistentemente), hacédnoslo saber.
Alumno/a |
Álbum |
Laia |
|
Sía |
|
Fernando |
|
Arturo |
|
Vera |
|
Mateo |
|
Abril |
|
Aarón |
|
Olivia |
|
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